El fluoruro en las
últimas décadas ha sido un factor clave para la disminución de la caries
dental que se ha venido observando en diversos países del mundo.1
Sin embargo, la disponibilidad de fluoruros a través de diversas
fuentes como las aplicaciones profesionales, programas de salud bucal,
alimentos y bebidas, entre otros, ha ido incrementando.2–4 Hoy en día, virtualmente todos los niños mexicanos se encuentran expuestos a diversas fuentes de fluoruro.3,4
En los países industrializados la disminución de la caries dental ha
ido acompañada por un incremento en la prevalencia de fluorosis dental;5
ésta puede tener un efecto cosmético negativo en los individuos y puede
afectar las relaciones sociales y tener repercusiones psicológicas.6–8
La
intoxicación crónica por fluoruro es un problema de salud mundial que
se presenta de manera endémica en áreas donde el contenido de fluoruro
en el agua se encuentra por arriba del nivel óptimo.9,10 Las
principales manifestaciones de la intoxicación por fluoruro tienen
consecuencias menores, como el moteado del esmalte dental (fluorosis
dental) y la osteosclerosis del esqueleto.9
La
fluorosis dental es un defecto en la formación del esmalte que resulta
de la ingestión excesiva de fluoruros durante el desarrollo del diente.
La ingestión de fluoruros antes de los tres o cuatro años de edad es
crítico para el desarrollo de fluorosis en los dientes permanentes
estéticamente importantes.11,12 Sin embargo, para los dientes
más posteriores, como los caninos y premolares, este límite puede
extenderse dos o tres años más. Clínicamente puede observarse como
manchas que van desde un color blanquecino hasta un café oscuro, o
incluso la pérdida de continuidad del esmalte. La severidad de fluorosis
está relacionada con el tiempo, duración y dosis de la exposición al
fluoruro durante los periodos de susceptibilidad en el desarrollo del
diente.3,7,10,12–14
Estudios
conducidos a finales de los 30's y principios de los 40's en
comunidades con niveles diferentes de fluoruro en el agua encontraron
que la prevalencia de caries fue menor a la reportada en otras
comunidades por alrededor del 50%. Sin embargo, esta reducción estuvo
asociada con la presencia de fluorosis dental en sus diversas formas.10
En 1942, Dean observó en comunidades donde había una mayor
concentración de fluoruro y más prevalencia de fluorosis dental. En
décadas recientes se ha observado un aumento de la prevalencia de
fluorosis dental alrededor del mundo –con porcentajes que van de 7.7 a
80.7% en áreas donde se cuenta con agua fluorada y entre 2.9 a 42% en
áreas sin agua fluorada.15
La
fluorosis dental es uno de los problemas de salud pública en
odontología que se está presentando y ha sido estudiada de manera más
intensa en la dentición permanente de los niños en edad escolar. En
México, ésta ha sido reportada principalmente en los estados del norte y
centro del país a través de estudios descriptivos, donde se presenta de
manera endémica por hidrofluorosis.2,3,16–21
Sin embargo, en la región sur–sureste del país se tienen pocos reportes
sobre la prevalencia y de los factores asociados de fluorosis dental.
Esta omisión en los reportes de la literatura resalta la importancia de
identificar las causas del incremento en la prevalencia de fluorosis
tanto en comunidades hidrofluoradas como en no hidrofluoradas de México.
En relación con estudios realizados en la región sur–sureste, donde no
se tienen antecedentes de hidrofluorosis, en un trabajo realizado en la
ciudad de Campeche se observó una prevalencia de fluorosis de 51.9%,
siendo el mayor porcentaje (43.9%) el de grado muy leve y el menor el
grado de fluorosis severa (0.03%).22 En la ciudad de Veracruz, en un estudio piloto la prevalencia de fluorosis reportada en sus diversos grados fue de 24.3%.4 Sin embargo, debido a la diferencia en los índices utilizados la comparación de los resultados se vuelve limitada.
El
objetivo de este estudio fue determinar la prevalencia y severidad de
fluorosis dental y evaluar fuentes adicionales de exposición a fluoruro
como factores de riesgo a fluorosis dental en escolares de seis–nueve
años de edad en la ciudad de Campeche, México.